Esta será la primera ocasión que diputados en funciones en el Congreso, tengan el respaldo de la Ley para aprovechar la oportunidad de mantenerse en el puesto de legisladores para el periodo de 2021 – 2024, por supuesto con la condición de recibir los votos a su favor de parte de los electores.
García del Horno mencionó que, en el periodo de 2018 – 2021, el partido surgido del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ganó la mayoría en la Cámara de Diputados con 250 legisladores, más 46 del Partido del Trabajo y 24 de Encuentro Social –que formaron parte de la alianza triunfadora—lo que les dio la facultad para reformar la Constitución en la materia, a su antojo y a su libre albedrío.
Estos resultados dieron la pauta para que, el 18 de marzo de 2020, la Junta de Coordinación Política acordara la Reforma a la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, y de la Ley General de Partidos Políticos en materia de Elección Consecutiva de Legisladores Federales.
Este mecanismo legislativo incluyó la modificación de muchos otros artículos constitucionales, entre ellos el Artículo 59, para establecer que los senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos, y Los diputados al Congreso hasta por cuatro periodos consecutivos.
Este acuerdo concertado entre partidos representados en el Congreso, hizo extensivos los beneficios de la reelección para diputados de los Congresos Estatales, Presidentes Municipales y Regidores y Síndicos, para el caso de los ayuntamientos.
Así, dijo, con todos los elementos que conforman un pastel totalmente adornado con “velitas y amarrado” desde la perspectiva legislativa, “cumplieron con todas las de la Ley”, los legisladores ahora se disponen a partirlo y repartirlo “entre toda su República Mexicana”, sin importar si su desempeño, en este caso vigente hasta septiembre del 2021, haya sido bueno, regular o malo. Borrón y cuenta nueva, según el dicho popular.
Una vez impuesta su “ley”, algo les falló a los legisladores en cuanto a la normatividad que deberá aplicar el Instituto Nacional Electoral (INE) para igualar circunstancias respecto de la competencia con los aspirantes a candidatos que no son actualmente legisladores; es decir, lo que se denomina “cancha pareja” para todos los aspirantes.
Obviamente que los actuales legisladores quieren “mamar y dar de topes”, como le hacen los becerros cuando la ubre de la vaca ya no tiene leche; le dan de topes para exprimir la teta y chupar la última gota.
Existe la seguridad en más de 80 por ciento de la población mexicana, que las modificaciones y disposiciones legislativas a la Constitución, “obedecieron al presidente” en cuanto a decenas de artículos que cambiaron el rumbo del desarrollo económico, político y social del México contemporáneo, pero no para avanzar sino para retroceder.
Por último, dijo García del Horno, hay más de todo, más pobres, más enfermedades, más importaciones de alimentos, más muertes, más manifestaciones públicas por inconformidad social, más inundaciones en temporada de huracanes, más decisiones equivocadas por ordenar apertura de compuertas de presas que afectaron más a comunidades empobrecidas, más manifestaciones en contra de cómo es gobernado este país… más inversiones para revivir al decadente petróleo, para obras superfluas aeroportuarias en ciudad de México y el sureste, Tren Maya y Dos Bocas.