Edgardo Torres / LikeMty
Que la afición de los Rayados se fuera del Gigante de Acero 10 minutos antes de que finalizara el partido ante Cruz Azul, solamente fue un reflejo de la frustración tras ser humillados en casa por La Máquina.
Cruz Azul goleó 0-4 a Monterrey en el estadio BBVA en un partido para el olvido para los dirigidos por Fernando Ortiz, quien nunca logró la manera de hacer que su equipo reaccionara ante el juego colectivo del equipo de Martín Anselmi, quien le ha dado una lección táctica.
Porque fueron cuatro goles los que marcaron los cementeros, pero pudieron haber sido más, sin importar que Sergio Canales y Brandon Vázquez tuvieron una oportunidad cada uno para acercar a los locales, sin lograrlo.
Cruz Azul arrancó rápido con el dominio en el campo y lo tradujo a goles. El primero de ellos fue de Nacho Rivero, quien al 14’ hizo el 0-1. Sobre la cancha solo había un equipo con dominio de balón y de las acciones.
Una mano dentro del área de Rayados se convirtió en penalti en favor de La Máquina y en el primero de los dos goles de Carlos Rodolfo Rotondi, al minuto 28.
En el complemento, Ortiz buscó moverle a su equipo con el ingreso de Jordi Cortizo, el debut de Johan Rojas y el ingreso de Vázquez, y tuvieron alguna, pero no la metieron, mientras que Cruz Azul incrementó el marcador a los 50 minutos con un gran gol de Rotondi, para su segundo de la noche.
LLEGÓ EL 0-4
El 0-4 vino al 76’ por conducto de Ángel Sepúlveda, quien había entrado de cambio y en otro descuido de la zaga rayada, marcó uno de los grandes goles en lo que va del torneo.
Dominio total de La Máquina sobre los Rayados, humillación en casa, humillación que los aficionados del Monterrey no aguantaron, por lo que prefirieron salir del Gigante de Acero mucho antes del silbato final.