Por: Luis Gerardo Treviño
En esta ocasión no me refiero a ningún programa de asistencia gubernamental como los del bienestar, de 65 y así, tampoco a una rola como las del finado José José con su 40 y 20 aquí me quiero referir a los 40 y más grados de temperatura que se presentan en muchas ciudades de nuestro territorio nacional, aun andamos buscando si la causa es el niño o la niña pero la realidad es que los efectos del cambio en el clima o cambio climático se sienten, se disfrutan o se sufren, con ello hay un montón de cosas que tenemos que hacer para tratar de que sus efectos nos peguen despacio o poquito, pero de que están presentes eso no lo podemos negar, por más incrédulos que seamos de este tipo de fenómenos.
Disfrutar estas temperaturas en un ambiente cómodo como de quien tiene su entorno climatizado y hasta frio, puede ser muy agradable, pero si pensamos en los que tienen que trabajar en exterior, en la calle sin poder tener la comodidad de refrescarse y si aguantar jornadas de intenso calor, pienso también en los amigos obreros que de por sí ya están en áreas de calor más la intensidad que represente el exterior, también en las familias en cuyas casas existe techo de lámina que atrapa el calor y que dificulta el descanso, ayer trataba de ser solidario- ahorrador y con lo bueno que soy para desconectarme a la hora del sueño, no me fue posible conciliarlo por el intenso calor, tuve que recurrir a lo artificial, ya con el clima encendido aun así me resulto difícil.
Hoy estas temperaturas nos ponen a reflexionar y con ello preguntarnos ¿qué hacer con tanto calor? ¿Habrá manera de convertirlo en algún satisfactor a las necesidades de calidad de vida que tenemos los ciudadanos? Los que le saben a temas energéticos nos dicen que esta fuente de energía solar se puede aprovechar con las herramientas para captar las radiaciones solares y poder convertirla en energía eléctrica, esta es limpia, sustentable y otros atributos como los del precio, a este respecto es muy importante considerar que nuestro pueblo vive en pobreza energética, y que este es uno de los grandes temas que deben tener los aspirantes a la presidencia de la república, pues una gran cantidad de mexicanos no les alcanza su dinero para poder tener los satisfactores de energía que permitan descansar o vivir en un ambiente confortable, proponemos que se tenga en cuenta buscar tener justicia energética para los que menos tienen y también merecen gozar de los beneficios que puede tener ser habitante y ciudadano de un país en donde puede haber un desarrollo en materia de energía en beneficio de todos.
Obvio lo que se ocupa es voluntad, apartarnos de las ideas del pasado y poner en prospectiva que para el desarrollo de las comunidades se requiere pensar en desarrollar y plasmar en el Prodesen, el crecimiento de la red generadora de energía, así como la red de transmisión y distribución de energía eléctrica llegando a todos los rincones de nuestra patria, pero también poder eliminar esa pobreza energética, que dicho en lenguaje sencillo resulta de que la economía de las familias tengamos dificultad para pagar las cuentas de servicio de energía eléctrica para lograr una forma de vida digna, para todos los compatriotas. Este es un gran tema que debe estar entre los puntos y compromisos básicos de todos aquellos corcholatas o coordinadores o aspirantes a gobernar esta gran nación de hacer justicia para los que vienen en desarrollo, dando oportunidad de vivir bien y no solo de discurso, pues eso suena muy bien en la promesas de campaña, pero la historia nos confirma que han sido puro lero, lero, los que han estado al frente independientemente de los colores que los han presentado o propuesto como alternativa electoral para presidir.
Si ocupan expertos en estos temas tengo varios maestros y compañeros con mucha energía que seguro podremos contribuir a realizar de manera eficiente estos proyectos.