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 Más de 65 mil piezas de Lego fueron unidas por Brynjar Karl Birgisson, un niño islandés de 15 años de edad con autismo, para formar la maqueta del Titanic más grande del mundo.

 

El pequeño comenzó con esta idea cuando tenía 10 años de edad y en un principio usó 56 mil piezas, sin embargo, no fueron suficientes y terminó utilizando 65 mil, durante los 11 meses que tardó en construir la réplica. 

La maqueta se exhibe en Estados Unidos en el Titanic Museum Attraction en Pigeon Forge, Tennessee, y permanecerá ahí hasta diciembre de 2019.

La réplica fue trasladada cuidadosamente en 3 piezas desde Islandia y fue reconstruida en Estados Unidos.

De acuerdo con CNN, Brynjar comenzó a pasar horas jugando con Legos cuando tenía 5 años de edad.

"A veces he construido siguiendo las instrucciones y otras veces he seguido mi imaginación", afirma el pequeño.

Su interés fue primero por los trenes y posteriormente, cuando su abuelo lo llevó a pescar en bote, se interesó por los barcos.

"Cuando viajé con mi mamá a Legoland en Dinamarca y vi por primera vez todos los increíbles y grandes modelos de casas famosas y aviones, lugares y barcos, probablemente comencé a pensar en hacer mi propio modelo de Lego. Para cuando tenía 10 años de edad, comencé a pensar en construir un modelo del Titanic con piezas Lego del tamaño (a escala) de un hombre Lego", comenta.

El proyecto de Bjarney se convirtió en una actividad familiar, en la cual su abuelo y su madre participaron. Fue su abuelo Ogmundsson, un ingeniero, hizo un plano del Titanic a escala que les ayudó a saber cuántas piezas se necesitarían.

Gracias a donaciones de familia y amigos lograron comprar todas las piezas.

Brynjar dice que construir la réplica del Titanic lo ha ayudado a aceptar su autismo. Antes de realizar este proyecto le costaba más trabajo comunicarse, lo cual hacía que se sintiera triste y solo. Ahora se siente más seguro de sí mismo y está dando entrevistas acerca de su maqueta.

"Cuando comencé con el proceso de construcción tenía a una persona ayudándome en la escuela en cada paso, pero hoy estoy estudiando sin ningún apoyo. Mis calificaciones han mejorado y mis compañeros me consideran su colega. He tenido la oportunidad de viajar y explorar y conocer gente maravillosa", señala Brynjar.

El abuelo de Brynjar considera que la sociedad debe ser más comprensiva con respecto al tema del autismo.

"No debemos tener miedo al autismo. Muchos grandes científicos y líderes nacionales han tenido y tienen autismo. Lo que importa con respecto a estos individuos es que ellos sean comprendidos y reciban apoyo, porque todos pueden aprender de estas personas si escuchan lo que están diciendo", puntualiza Ogmundsson, abuelo del chico.

Redacción / LikeMty