Las estudiantes preuniversitarias de la Ciudad de México, Morelos y Campeche, fueron designadas a partir de una preselección en el Concurso Nacional de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas (OMM), organizado cada año por la Sociedad Matemática Mexicana y respaldado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

“Las mejores ocho inician entrenamientos a principios de diciembre, luego a finales de enero y el último entrenamiento en la primera semana de marzo. Son tres entrenamientos intensivos que duran diez días”, comentó el doctor Rogelio Valdez Delgado, presidente de la OMM. Después de los entrenamientos y exámenes fueron seleccionadas para participar en la competencia internacional y se designó a Isabel Hubard Escalera, como la tutora del equipo.

La OMM es un programa de la Sociedad Matemática Mexicana, tiene treinta y dos años organizando concursos nacionales para promover el ingenio y creatividad de las matemáticas a nivel básico y de bachillerato. Además se encarga de elegir y entrenar equipos para distintas competencias internacionales y a la fecha son 40 estudiantes los que entrenan para competir en ocho olimpiadas de diferentes niveles y estilos, detalló el presidente de la OMM.

La doctora Isabel Hubard recalcó que la mayoría de las competidoras lleva años participando en las olimpiadas. Los entrenamientos específicos para la olimpiada femenil son campamentos de diez días y de nueve horas diarias, organizados en diferentes estados de la república como Guanajuato, Morelos, Yucatán, Hidalgo y el Estado de México.

“En los entrenamientos aprenden cosas nuevas que no se ven en la escuela. No es que adelanten conocimientos, sino que ensayan temas diferentes, como algunos que se ven en los primeros semestres de la carrera de matemáticas. pero inclusive no solo los conocimientos, lo más importante es la creatividad para resolver los problemas” comentó la experta.

En 2014 México se llevó tres medallas de bronce durante la EGMO, mientras que en 2015 lograron una medalla de plata y tres de bronce. En 2016 lograron una medalla de oro y una de plata y el año pasado trajeron al país una medalla de plata y tres de bronce. Sin embargo no sólo se trata de ganar medallas, sino de adquirir experiencia y ser este evento un semillero de matemáticas.

“Yo participe en la OMM cuando estaba en el bachillerato. A mí la olimpiada me ha dado muchísimo, porque siempre me gustaron las matemáticas, pero fue gracias a la olimpiada que conocí unas matemáticas diferentes y decidí estudiar la carrera de matemáticas” recordó Hubard, quien ganó el premio L’Oréal-Unesco-AMC en 2012.

El aprendizaje de las matemáticas ayuda a que los estudiantes razonen, aprendan y resuelvan problemas utilizando la lógica, por ello el hecho de que participen estas cuatro mexicanas es un gran ejemplo para los amantes de esta disciplina.

Con información de Conacyt.